Destacada labor de sus defensores Lautaro Slpizer y Martina Aslan.
Los magistrados le concedieron la prisión domiciliaria a Rubén Altamiranda, un joven de 18 años que robó y amenazó a sus víctimas con matarlas y cortarle las piernas.
Fue tras acuerdos y presentaciones realizadas por su abogado defensor.
Durante 12 años evadió a la Justicia. Fue capturado en plena vía pública. A pesar de esto, le otorgaron la libertad.
El juez hizo lugar al pedido de la defensa. La acusada es madre de una menor de edad y único sostén de familia. Si la fiscalía no apela, regresa al hogar.